Hace ya algunos meses os conté en este artículo mi visita y experiencia inicial con la zapatería Manuel Gómez Artesanos. Tras aquella visita, y en un par de ocasiones más, me he acercado a saludarles y charlar, porque tanto Luis Manuel Gómez -padre- como Arantxa Gómez -hija- son una fuente inagotable de historias, anécdotas y peripecias entorno al mundo del calzado, que personalmente me encanta compartir con ellos.
En mi última visita no pude evitar llevarme unos mocasines Fullstrap que ya en otra ocasión llamaron mi atención, para mostraros esta opción quizás menos vista en España entre marcas y tiendas de calzado.
Como podemos ver se trata de un modelo de mocasín realizado en piel Roig en color cuelo, una tonalidad que sin duda me parece preciosa y que puede resultar muy polivalente.
El Roig es una piel rectificada de cierta calidad, que nos aporta las ventajas que tiene este tipo de pieles, es decir, un sencillo mantenimiento y una gran durabilidad.
El modelo de mocasín Fullstrap se caracteriza por asemejarse a un Penny, pero con la peculiaridad de que el antifaz continua hacia la costura de la suela, y cosiéndose solidaria a ella. Estéticamente se consigue un diseño limpio, curioso y cuidado. Y en cuanto a nivel práctico se consigue un empeine más reforzado y rígido.
En cuanto al nivel de detalle y acabado en los zapatos de Manuel Gómez encontramos un listón muy alto y si bien a simple vista pueden parecer similares a otros modelos de precios inferiores, cuando nos acercamos al detalle comprobamos dónde está la diferencia.
Acerquémonos un poco para comprobarlo…
En la zona del talón encontramos la típica solución de una tira cosida uniendo ambos cuartos traseros en el eje de simetría del contrafuerte del talón. Una vez más con un cosido de puntada minúscula y perfectamente ejecutado.
En la siguiente imagen podemos apreciar en perspectiva cenital la forma de esta horma. Ligeramente ancha en el empaine y algo más baja de pala, detalles que apreciaremos luego en la puesta.
No lo he dicho antes, pero en este caso se trata de un zapato confeccionado mediante construcción Goodyear, lo que le confiere una durabilidad y posible reparación en el futuro, a cambio de quizás un plazo de adaptación inicial.
En el interior una plantilla de cuero a media longitud nos recuerda quién firma el zapato, artesanos desde 1925.
A continuación veremos como queda puesto este modelo en los pies, y aunque me he decantado por una combinación un tanto sport, creo que este tipo de calzado podría tener perfectamente cabida con un atuendo algo más formal, con por ejemplo, un pantalón de vestir gris marengo y una americana en contraste.
Llegamos al final y tenemos que decir que si bien este zapato no tiene un precio económico (230 euros), cuando analizamos detenidamente sus acabados y calidades nos damos cuenta de que estamos ante un producto de una calidad extraordinaria. En tienda cuentan con más variantes de piel y tonos de este mismo modelo.
Además tengo que anunciar que como detalle desde Manuel Gómez Artesanos nos han ofrecido un 10% de descuento para este modelo a todos los seguidores de SinAbrochar.
¡Seguimos con el Viernes!
