A estas alturas a nadie sorprende saber que la firma española Crownhill cada día nos ofrece mejores zapatos. Prueba de esa apuesta por un calzado de mayor calidad y materiales fue la presentación hace unos meses de la nueva línea Premium Grade. Lo cierto es que de los 11 modelos que componen hoy dicha serie de alta gama, diría que prácticamente todos me resultan interesantes para incluir en mi armario. Pero hoy vamos hablar de uno de los modelos que más me gusta entre todos ellos: The Brando.
Mocasín Penny con construcción Goodyear que cuenta con unas calidades y acabados superiores, consiguiendo una presencia y confort notables.
En esta ocasión ya si hemos podido probar el packaging difinitivo de esta gama y la verdad es que las sensaciones percibidas no pueden ser mejores. La nueva caja de cartón rígido forrada con papel texturizado de color verde y troquelada con el logo de la marca en dorado, es la carta de presentación que cabe esperar de un producto de esta categoría -y precio-. No deja indiferente, y conforme vamos abriendola, descubrimos nuevos detalles que van sumando hasta conseguir una imagen de producto realmente excepcional.
En el interior encontramos un papel grueso al mismo tono que la caja, que hace las veces de separador y decorador previo al descubrimiento de cada par de zapatos. Éstos vienen presentados en sendas bolsas individuales de algodón perchado, además de un calzador personalizado con el logo de Crownhill.
Una vez que descubrimos cada par comenzamos a darnos cuenta de que estamos ante un calzado de una calidad superior a la nos tiene acostumbrados la marca, y eso que el que nos ofrecía antes -y sigue ofreciendo- no era precisamente bajo en calidades.
¿Dónde están las diferencias?
Lo primero que notamos es un tipo de piel diferente, con otro aspecto, más personalidad, flexibilidad y resistencia. En este caso concreto la culpa la tiene este Box-calf en color burdeos/rojizo de la conocida tenería francesa Degermann.
El tipo de construcción de la suela también varía de una gama a otra, y en este caso nos encontramos ante un cosido Goodyear con costura oculta, que además presenta algunos detalles muy interesantes que iremos desgranando más delante.
La horma Nelson auna la amplitud interior que caracteriza a todo zapato de Crownhill con el diseño estilizado y ligeramente afilado que a algunos tanto les gusta. Los detalles de bordón, costura de antifaz y cerquillo se notan cuidados al milímetro.
La suela es otro elemento donde la calidad de todo zapato queda constatada. Contamos, en este caso, con una suela de cuero de 4.5 mm procedente del prestigioso fabricante John Rendembach, creadas a partir de curtición con raíces de Roble y Quebracho, y acabada al aceite durante los últimos meses.
En la suela seguimos viendo muchos detalles, como la puntera reforzada con clavos de latón, la base tintada a mano en forma de paloma, el tacón fijado con clavos en forma de rosa, detalles que además de estéticos, en algunos casos, han sido elegidos en pro de la durabilidad.
El interior no se queda atrás, contando con un forro completo en piel de curtición vegetal. Además de incluir el detalle de la ventana interior redondeada en uno de los laterales, y una planta interior de 4mm acolchada con bisel en el muro.
Para garantizar estabilidad y equilibrio al zapato, este modelo incluye doble cambrillón, de metal y cuero respectivamente.
Zapato elegante y polivalente donde los haya, que merece la pena descubrir en su estado natural. Es decir, puestos. Por ello os dejo a continuación algunas fotografías con los zapatos, en esta ocasión en un look informal con chinos color beige, y de cara ya al verano con calcetines invisibles.
Color, formas, diseño y materiales polivalentes que hacen de este zapato nuestro perfecto aliado para diversas circunstancias entre informales y algunas con mayor formalidad. Sobrio, elegante y tradicional, son algunos de los epítetos que definen a este zapato.
A mí lo cierto es que me han conquistado.. ¿Tu podrás resistirte?