Este puede resultar un tema muy manido, pero en cuanto a empleo la cosa está bastante reñida y hay que arañar puntos de donde haga falta con tal de conseguir destacar sobre los demás.
Es difícil hacer un resumen genérico que sea válido para todo el mundo, porque está claro que no todos aspiramos a un puesto en un reputado bufete de abogados. Sin embargo, hay consejos que deberían ser tenidos en cuenta por cualquier persona que se exponga a este tipo de situaciones, independientemente del cargo al que aspira o el sector al que pertenece.
Siempre trato de defender que la elegancia no tiene por qué ser reservada para momentos puntuales, sino que debemos disfrutar de ella a diario. Por ello, siempre tendríamos que cuidar nuestra imagen. Pero si somos conscientes de que no es así, al menos debemos ser cuidadosos en esos momentos de mayor exposición ante los demás.
Trataré de enumerar los 6 aspectos que considero importantes, en cuanto al vestir, ante una entrevista de trabajo o reunión de negocios.
1. Independientemente del cargo, sector o empresa, debemos ir lo más elegantes que nuestro contexto nos permita.
Es decir, que si somos un profesional freelance que ha concertado una reunión con un gran grupo empresarial interesado en sus servicios, indudablemente debemos presentarnos ante ellos con traje, o cuanto menos con una americana y camisa decentes.
Por el contrario si somos mecánicos especializados en motos, deberíamos de ir al menos con una camisa (metida por dentro), pantalones y unos bonitos zapatos. Dejando de lado el chándal, mono azul o vaqueros y camiseta publicitaria.
2. Nuestro higiene general debería apoyar esa imagen de formalidad que queremos dar. Por ello dientes, cabello, barba deben ser escrupulosamente lavados. Y detalles como puños o cuellos de camisa, bajos de los pantalones, coderas y demás partes propensas a mancharse deben ser también revisadas exhaustivamente.
3. Nunca nos presentaremos ante nadie con materiales deportivo: Gorras, zapatillas de deporte, chandal, sudadera o prenda similar.
Sinceramente, me da igual que seas el último cantante salido de un programa televisivo o que quieras dar imagen moderna y juvenil. Nunca debes presentarte ante un posible jefe con un atuendo deportivo. Denotará claramente una falta de seriedad por tu parte, aunque no sea así.
4. Huiremos de la ostentación y el lujo.
Vale, puedes ir con el Rolex Submariner que te regalaron tus padres cuando acabaste la carrera. Pero huye de accesorios y complementos llamativos.
Deja en casa las pulseras de oro, las cadenas con la cara de la virgen del Rocío o los gemelos de diamantes de Versace. No vamos a lucirnos a una entrevista o reunión, sino a hablar de trabajo.
Además, si ven que tienes posibles quizás puedan pensar que no necesitas tanto el trabajo como otros candidatos, y les de menos reparo desecharte. Recuerda que hay mucha competencia y los entrevistadores, en algunos casos, deben acogerse a pequeños detalles (positivos o negativos) para justificar su elección.
La discreción debe ser nuestra fiel aliada.
5. No vayas disfrazado. Es decir, no se te debe notar forzado o incómodo con la ropa que vistas. Prueba a usarla algunos días antes, aunque sea para estar en casa. Así conseguirás habituarte a ella.
Si no sabes llevar un traje, quizás es mejor que no lo hagas. Ten en cuenta que probarse un traje es mucho más que calzárselo y estar cómodo.
6. No estrenes nada en el día clave. A menos que sea un traje hecho a medida y probado antes varias veces, no te recomiendo que estrenes ninguna prenda ese día. Porque quizás sea de esas que no te acabas de hacer con ella, tanto por estética como por incomodidad. Y esto puede ponerte nervioso en momentos claves y arruinarte la jornada.
Y esto es todo, por hoy. Como he comentado antes este tema es mucho más amplio y hay muchos más conceptos a explicar y a tener en cuenta. Pero no puedo plasmarlos todos aquí porque sino esto se haría eterno y seguramente la mayoría de vosotros ni siquiera se detendría a leerlo.
Muy interante la nota, gracias!
Hola.
Me alegro de que te parezca interesante.
Saludos
Salva