Hace algunos meses pudísteis ver una de mis primeras camisas artesanales confeccionada por Haberdashers, en este otro artículo. Gracias a ese primer modelo, y dada la confianza que tengo con los chicos de esta sastrería madrileña, decidí ir más allá y tratar de implementar ciertos detalles, que dicho sea de paso han coseguido a la perfección.
Antes de nada quiero aclarar que en general, y por una simple cuestión de gustos personales, no soy muy amigo de las costuras con tonos de contraste. Sin embargo, en contadas excepciones y aplicadas de forma razonada creo que pueden otorgar a nuestras prendas un detalle diferente. En este caso, mi objetivo fue tratar de hacer más patente la mano de obra artesanal en este tipo de camisa. Para ello quise usar el hilo de contraste con el ánimo de resaltar estas partes por encima de las más industriales.
Antes de meternos en detalles os diré que esta camisa se pensó, como casi todo mi armario, como prenda entre sport y formal. Con idea de ser usada con corbata pero en un contexto relajado.
Quizás lo primero que llama la atención de esta camisa es su cuello, de proporciones grandes y ligeramente arqueado, producido por el sistema que ya se ha convertido en un clásico en mis camisas, compuesto por botones interiores ligeramente retrasados y puntas de 9 cm.
El tejido, como podéis ver se trata de un estampado de rayas grises, en un tono ligeramente crema que me encantó en cuanto lo descubrí en el catálogo de Söktas, firma turca de tejidos camisero de una gran calidad. Este tejido tiene un tacto realmente increíble, con un título de 100 / 2 cabos, nos encontramos ante un paño de una extraordinaria calidad. –Si quieres averiguar más sobre la Teoría de los tejidos haz click aquí-.
Arriba podemos ver cómo esta camisa cuenta con botones de nácar y ojales realizados a mano, con hilo de contraste gris medio como avanzábamos al comienzo.
Y, como suelo hacer habitualmente, mis iniciales -cosidas a mano- van en el costado a la altura del abdomen. Un lugar más discreto y menos visto.
Un detalle que a muchos les parecerá una tontería y a otros directamente no les gustará, pero que a mi particularmente me ha encantado, ha sido optar también por el hilo de contraste gris en el cosido a mano del montado de las mangas al hombro. De esta forma lo que antes era tan sólo una intuición artesanal, ahora se convierte en todo un punteado irregular que deja claro el uso de la mano en este proceso, dotándo a la camisa además de un aire algo más desenfadado.
Volvemos a decantarnos por el contraste en el cosido -a mano- del dobladillo del bajo, incluso atravesando el detalle de los triángulos de refuerzo en tejido oxford blanco, que también solicité expresamente.
Pero no todos los detalles a mano eran tan visibles. Por ejemplo, el montado -a mano- de los puños se hizo por el interior, dándo como resultado un pespunte en la parte oculta, como podemos ver en la siguiente imagen.
Bajo estas líneas vemos detalle del botón interior del cuello. Como podemos ver la ejecución de todo el conjunto es extraordinaria, incluyendo, cómo no, un botón de nácar de menor tamaño.
Más abajo vemos detalle del pie de cuello de 3.5 cm con un único botón de cierre superior con ojal oblicuo.
El dar el paso de la camisería a medida industrial a la artesanal es un tema similar al hecho de saltar del Made to Measure al Bespoke. Y seguramente los razonamientos y opiniones son semejantes tanto para una dicotomía como otra. Pero lo cierto es que el encanto y la esencia artesanal que tiene una camisa artesanal no lo encontraremos en una camisa a medida industrial. Una vez que pruebas este tipo las otras te resultan algo más frías, anodinas, como sin alma.
Lo bueno es que gracias a Haberdashers podemos optar por ellas desde 120 euros.
¡Buen fin de semana!