Review Monkstrap de ante de Saint John Shoes.

Espero que no os quejéis con el número de reviews y reportajes que estamos teniendo en las últimas semanas…

Hoy nos toca hablar de una marca de zapatos que ya algunos conocéis y que lleva poco en esto, se trata de Saint John Shoes. Se caracterizan por ofrecer cierta personalización en sus zapatos por encargo.

Están evolucionando y creciendo muy rápido, ya que acaban de abrir una tienda en Madrid (Claudio Coello, 5) y no paran de organizar Showroom.

Hace algo más de un mes me puse en contacto con ellos y decidí pedirles unos zapatos para probar y valorar la experiencia. La atención ha sido impecable, avisándome de que el plazo máximo de entrega era de 6 semanas, al ser un modelo que no tenían en stock.

Finalmente en unas 4-5 semanas tenía los zapatos en mi poder. Se trata de unos monkstrap doble hebilla en ante color tostado. Tenía ganas de unos zapatos de este estilo!

La caja de cartón en la que venían los zapatos era de diseño espartano y no merecía la pena colgar una foto, sin embargo en su interior encontramos todo lo que vemos arriba. Como no, los zapatos. Una bolsa de viaje o almacenaje y además un pequeño kit que podemos ver en la siguiente imagen:

Como veis, incluye un pequeño calzador, un cepillo, una gamuza y un bote de crema (en este caso no es necesario, pero bueno)

Vemos algunas fotos más del packaging incluido:

Centrémonos en lo que importa, el zapato… He de reconocer que nada más sacarlos de la caja la vista se me fue a las enormes hebillas, y esto en un principio no me gustó nada. En marcas como Meermin o Harry´s 1982 y demás estos elementos son algo más discretos.

Pero igualmente reconozco que una vez puestos este detalle pasa muy desapercibido, y poco a poco se me fue olvidando por completo este hecho. Sólo tenéis que recordar aquella foto que colgué en Instagram hace unos días:

Este color marrón medio, que a mi me gusta llamar tostado, me parece precioso y muy combinable. Queda bien con tonos azules, denim, grises claros..

Tenemos que tener claro siempre que el precio de este zapato es unos 80 euros. Sus calidades y acabados no son comparables con gamas más altas como Meermin, pero su relación calidad/precio no está nada mal. Además de que es muy difícil encontrar unos doble monkstrap en este rango de precio.

El aspecto de su ante no tiene mala pinta. Aunque, no sé si es por su fabricación o calidad, presenta algunas marcas en zonas más amplias como el empeine y puntera. Pero son detalles que se homogeneizarán con el uso de unos días.

Si nos fijamos en la suela, completamente de caucho en su parte más externa, su construcción parece ser blake, aunque no he confirmado el dato.

Una vez más podríamos entrar en la dicotomía de la idoneidad de las suelas de caucho, pero yo sigo prefiriendo ver este aspecto como una ventaja -comodidad- más que un inconveniente -durabilidad-.

La calidad de las costuras es correcta, así como el corte y doblado de la piel, sin encontrar ningún punto negativo en este apartado.

Un aspecto que no me gustaría dejar en el tintero, y que me apresuré a avisar a los responsables de la marca en cuanto me percaté de ello, además de las proporciones de la hebilla -que no deja de ser un tema subjetivo- es el tamaño del interior de las mismas así como su remate.

Al menos en mi unidad recibida, me di cuenta de que el tamaño de la piel que funciona a modo de correa frete al tamaño del hueco proporcionado por la hebilla es demasiado justo, por lo que además de dificultad su abrochado, también compromete a largo plazo la durabilidad de esta zona. Por lo que considero que es un punto que debería arreglarse.

Otro detalle que me disgustó -aunque fácilmente solucionable- es el acabado demasiado puntiagudo del perno de cierre, ya que esto puede hacer que sin querer rasguemos la piel interior y a la larga estropeemos esta zona. Yo lo he solucionado pasando una lija por cada punta.

Los aspectos que comentaba anteriormente, aunque negativos, los veo comprensibles en una empresa que está empezando y que poco a poco trata de hacerse un hueco. Pero son los detalles que a la larga hacen diferenciar un producto.

Una vez más, este es uno de esos casos en los que me sorprende un zapato por su horma. Ya que nos encontramos ante ese tipo que tanto me gustan: Redondeadas y equilibradas, huyendo de diseños afilados y puntiagudos.

Como conclusión tras todo lo comentado y habiéndolos usado ya dos o tres días, puedo decir que es un zapato que no me arrepiento de haber comprado.

Su color es precioso, sus formas y comodidad más que buenas. Es cierto que no será un zapato que nos dure toda la vida. Seguramente a día de hoy no pasará de dos temporadas de uso intensivo, pero sin embargo y como ocurría en el caso de los Monkstraps azules de Massimo Dutti, sigo pensando que su compra puede ser interesante.

Espero que hayáis podido conocer un poco más de acerca esta Saint John Shoes, y que estos en un futuro no muy lejano nos vayan sorprendiendo con nuevos productos.